Quimicos en la piel de las frutas

Aunque no lo creas, las mandarinas y naranjas (y otras frutas) pueden llevar aditivos y fungicidas en la piel. Se añaden después de su recolección, para que las piezas se mantengan intactas y apetecibles durante más tiempo. Los nombres de esas sustancias químicas los encontrarás en las etiquetas: mira qué son, para qué sirven y cómo evitarlos.

En la etiqueta, mira la letra pequeña

¿Te has fijado alguna vez en lo que ponen las etiquetas de las mandarinas o naranjas que se venden envasadas? Si compras esa fruta a granel, y esa información no está visible, puedes pedir al frutero que te muestre la etiqueta original de la caja.

Nos referimos al texto con letra pequeña donde indica qué sustancias se han utilizado para tratar o conservar la fruta.

Químicos en la piel de los cítricos

Estos son algunos de los nombres de los productos químicos con los que te puedes encontrar al leer el etiquetado:

Ceras: desde la E901 a la E904, E912, E914… 

Conservantes como el E202 (sorbato potásico)

Antifúngicos como:

• IMZ o Imazalil
• OPP u Orthophenylphenol (ortofenilfenol en castellano)
• PM o Pyrimethanil (pirimetanil en castellano)
• TBZ o Thiabendazol (tiabendazol en castellano)

Todos se corresponden a sustancias autorizadas por la Unión Europea y la legislación comunitaria obliga a declararlas en la etiqueta del producto.

Las ceras y conservantes son aditivos alimentarios, por eso pueden identificarse con una "E" seguida de un número. ¿Sabes para qué se emplean?

Las ceras abrillantan e impiden la transpiración

Las ceras crean una capa impermeable, por eso se emplean para evitan la deshidratación del producto. Además, aportan brillo, de ahí que su uso tenga que ver también con motivos estéticos y comerciales. En la etiqueta pueden aparecer indicadas solo con la letra E y un número. Estas son algunas de ellas:

1. E901: cera de abejas (de origen animal)
2. E902: cera de candelilla (de origen vegetal)
3. E903: cera de carnauba (de origen vegetal)
4. E904: goma laca (de origen animal)
5. E912: cera montana (de origen mineral)
6. E914: cera de polietileno oxidada (de origen sintético, derivado del petróleo)

Si eres vegano estricto, tal vez prefieras evitar las frutas que lleven ceras de origen animal.

Protección frente a los hongos

Sustancias como tiabendazol, imazalil, ortofenilfenol y pirimetanil son pesticidas con acción antifúngica, o fungicidas. Se suelen emplear como un cóctel para prevenir o tratar la contaminación por hongos, una vez que la fruta ha sido recolectada, durante la fase de lavado. En la fase de encerado también se pueden aplicar, ya que hay ceras que se venden mezcladas con algunos fungicidas. 

No obstante, debido a un uso prolongado y masivo de fungicidas están apareciendo hongos resistentes a los que no les hacen mella estos tratamientos. Es lo mismo que ocurre con los antibióticos. Además, estos productos pueden ser tóxicos para los ecosistemas acuáticos, si las aguas residuales no se tratan correctamente.

El sector hortofrutícola ya está probando a sustituir, aunque sea parcialmente, esos antifúngicos por otros conservantes, en principio, menos tóxicos, como pueden ser las sales de ácidos (tal es el caso del E202, sorbato potásico) y algunos aceites esenciales o extractos de origen vegetal.

Lava la piel de la fruta y tus manos

Todas las sustancias mencionadas están autorizadas por la Unión Europea y no debes alarmarte por su presencia, pues se quedan en la piel de las mandarinas y naranjas que a menudo solemos desechar. Únicamente, por precaución, lávate bien las manos después manipular la fruta y antes de comerla. 

Sin embargo, si en alguna preparación o receta vas a utilizar la piel, por ejemplo, si la vas a rallar, vas a cortar unas rodajas para una tarta o para los refrescos, etc., es muy importante que antes laves y frotes bien la piel de la fruta.

Fuentes.

Artículo:  "Aditivos y fungicidas hasta en la piel de los cítricos" Publicado en https://www.ocu.org/ por ocu el 12 marzo 2020. Consultado el 05/10/2021.

URL: https://www.ocu.org/alimentacion/seguridad-alimentaria/consejos/quimicos-piel-fruta