El queso de Burgos es uno de los quesos frescos más populares, aunque el más accesible, el que encontramos en los supermercados es muy diferente al tradicional, resulta un queso rico para comer sólo e ideal para incorporar en muchos platos, aquí tenéis doce recetas con queso fresco tipo Burgos.
El queso fresco de Burgos con un buen chorro de miel es un desayuno, postre o merienda que nos encanta, pero este queso nos da mucho juego en la cocina, puede formar parte de aperitivos, salsas, entrantes, guarniciones, tartas… Seguro que no tenéis ninguna duda de ello, y os encantará probar algunas de estas Doce recetas con queso fresco (tipo Burgos).
Rollitos de berenjena rellenos de queso: Un aperitivo sencillo pero que conquista por la combinación de sabores, la berenjena se fríe hasta que esté tierna, y se forman rollitos rellenándola con queso fresco, cebolla y tomate natural.